Marco teórico

Teniendo en cuenta la multidisciplinariedad del proyecto y el diseño específicamente participativo del mismo, se ha dividido la descripción del marco teórico en dos ítems:

 Marco teórico – enfoque social participativo
El proyecto se distingue por su peculiar diseño del dispositivo de intervención: la participación activa tanto del equipo como de la comunidad en la construcción del conocimiento. Éste enfoque se inscribe en el contexto de un  determinado marco teórico que se desarrolla a continuación:

“(…) En primer lugar, el que sabe nada sabe siempre un poco más de lo que parece
(…) Y por otra parte, sobre todo, la cultura sólo puede trasmitirse si se deja a la gente,
 en todo momento, la posibilidad de discutirla.”
Jean-Paul Sartre “El movimiento estudiantil: una crítica radical de la sociedad”, Entrevista.

El diseño del dispositivo de intervención se basa en el rechazo a la afirmación sin más de la superioridad de la ciencia sobre otros saberes. Sin embargo, tampoco pretendemos desvalorizarla sino todo lo contrario: revalorizar el propio y los otros saberes haciéndolos interactuar.
Desde esta perspectiva, consideramos que así como la ciencia tiene mucho que aportar a la comunidad, la comunidad tiene lo que aportar a la ciencia. El proyecto está pensado en base a la retroalimentación y aprendizaje constante entre ambas partes:

“La razón empieza allí donde cesan los discursos ordenados con el objetivo de tener razón, allí donde se reconoce la igualdad: no una igualdad decretada por la ley o por la fuerza, no una igualdad recibida pasivamente, sino una igualdad en acto, comprobada a cada paso por estos caminantes que, en su atención constante a ellos mismos y en su revolución sin fin en torno a la verdad, encuentran las frases apropiadas para hacerse comprender por los otros”
Jacques Ranciere
 El maestro ignorante, 2003, Ed. Laertes

En este sentido, no se pueden ignorar los conocimientos de la comunidad  sobre el entorno territorial en donde se asientan. Así, se buscará situar a los participantes del equipo en el mismo plano que la población local para favorecer el intercambio. El conocimiento científico servirá a la sociedad como herramienta para resolver sus problemas y formalizar las ideas y, a su vez, el equipo científico se nutrirá con los saberes y se guiará por las necesidades, dudas y cuestionamientos de los habitantes de Caviahue.
Teniendo en cuenta que hay un espacio dentro del proyecto que resulta una incógnita hasta tanto se lleven a cabo actividades de participación,  desde el punto de vista estrictamente académico, el equipo pondrá a disposición conocimientos de la ciencia política, filosofía política, sociología, biología, geología, volcanología y  tectónica.
El éxito del proyecto radica fundamentalmente en el correcto desarrollo del dispositivo de intervención. El plan de contingencia, el circuito eco-turístico y el organigrama de instituciones no son importantes de manera descontextualizada sino que lo verdaderamente importante será que los habitantes los desarrollen por sí mismos. Así, los objetivos carecen de valor intrínseco, en cambio adquieren su sentido verdadero gracias a los medios empleados para llegar a ellos: la participación directa de la comunidad en el proyecto. No es nuestra intención resolver los problemas de la comunidad desde el exterior como un “Deus ex machina” sino brindar herramientas para la solución desde adentro: ser parte de la solución desde la lógica interna del problema:

“Lo que es preciso comprender es que fin y medio constituyen una totalidad indisoluble; el fin se define por los medios que reciben de él su sentido; una acción es un conjunto significante que se despliega a través del mundo, a través del tiempo, y cuya unidad no puede romperse.” Simone de Beauvoir,  Idealismo moral y realismo político
en El existencialismo y la sabiduría de los pueblos, Edhasa 2009

 Marco teórico – Ciencias Exactas y Naturales
Teniendo en cuenta lo referente estrictamente a la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, el proyecto se inscribe en el marco teórico de los estudios sobre volcanología y riesgo volcánico.

Así, resulta relevante mencionar que las erupciones volcánicas pueden desencadenar desastres que afecten a la población, generando un impacto negativo sobre el ambiente, la vida y el desarrollo económico, social y cultural de una región. Es por ello que socializar el conocimiento volcanológico constituye la base necesaria para crear conciencia, como mecanismo para generar planes de acción que disminuyan la vulnerabilidad en las áreas  con potencial riesgo volcánico.
Es en este punto en donde resulta necesario definir algunos conceptos básicos que hacen al trabajo de la prevención de riesgos relacionados a áreas de influencia volcánica:

-   El riesgo se define como la expectación de que ciertos eventos produzcan un impacto negativo produciendo pérdidas en forma de vidas humanas, de bienes materiales y/o de capacidad productiva. Por lo que el riesgo tendrá siempre un valor numérico que será monetario o en cantidad de víctimas, cuantificable a través del producto de tres factores como son el valor, la vulnerabilidad y la peligrosidad.
-   La peligrosidad se entiende como la probabilidad de que un lugar, en un intervalo de tiempo determinado, sea afectado por un evento peligroso. El concepto de peligrosidad volcánica engloba un conjunto de eventos que se producen en un volcán y pueden provocar daños a personas o bienes expuestos. Estos eventos, conocidos como “peligros volcánicos”, pueden ser muy diversos, como caída de cenizas, flujos piroclásticos, coladas de lava, etc. Por este motivo, la historia eruptiva de un volcán es un factor importante a la hora de determinar su peligrosidad ya que el estudio de eventos ocurridos en el pasado  es extrapolado al período actual, pudiendo prever su comportamiento en el futuro.
-   La vulnerabilidad es la expectativa de daño o pérdida sobre un determinado elemento expuesto, generalmente expresada como una fracción de la pérdida total. El valor representa la cuantificación, en términos de vidas humanas, de coste, etc. de los elementos susceptibles de ser afectados por el evento considerado.

El problema del análisis del riesgo volcánico es que se desarrolla en un ámbito probabilístico que debe ir de la mano del estudio determinista del fenómeno, dejando un porcentaje de incertidumbre propio de la relación del hombre con el medio ambiente. Así es que, en la elaboración del plan de contingencia, se toma como referencia la mayor erupción producida a lo largo de la historia del volcán, de tal forma que la comunidad sea consciente de ello y esté preparada para afrontar el mayor de los riesgos, disminuyendo su vulnerabilidad.